No es lo mismo conducir en verano, que en invierno. Hay que adoptar distintas precauciones según la estación en la que nos encontremos. Las dos reglas básicas para viajar con el coche, especialmente en verano, son: prevención y prudencia.
Conducir cómodo con sol
Utiliza el parasol convenientemente inclinado formando visera de modo que te proteja los ojos de la luminosidad directa de los rayos solares y te permita ver sin dificultad la carretera.Utiliza gafas de sol, prestando especial atención con ellas, a los cambios de contraste y luminosidad que supone el entrar/salir de túneles o atravesar zonas de sombra, en que un vehículo, peatón o cualquier obstáculo son menos visibles. Las mejores para conducir son las gafas polarizadas.
Conducir cómodo con calor
Enciende el aire acondicionado del vehículo, o airea el habitáculo del mismo bajando las ventanillas y tomando la precaución de que los ocupantes no saquen por ellas los brazos o cabeza.Lleva bebidas frescas, no alcohólicas y haz paradas más frecuentes de lo normal a fin de hidratarse, airear el vehículo y relajarse.En las paradas procurar parar en la zona de sombra y si es en sol, nunca jamás, dejes personas mayores, niños o animales dentro del vehículo.Vigila y controla la temperatura del motor del vehículo.